La guerra de las divisas y los Rothschild
Posted by amerikuajedis en septiembre 16, 2010
Por: Alfredo Jalife-Rahme – La Jornada, México
Fecha de publicación: 13/09/10
Antecedentes: China ha pasado a una contraofensiva literaria de carácter doméstico con un género de libros de corte financierista que exponen aspectos relevantes de sus investigadores que no puede expresar la cúpula del Partido Comunista, entre los cuales se encuentran La conspiración Goldman Sachs (ver Bajo la Lupa, 29/8/10) y La guerra de las divisas, de hace tres años, del economista Song Hobing –con venta de más de 200 mil ejemplares– quien predijo la crisis global de 2008.
Las tormentosas relaciones de las dos principales superpotencias geoeconómicas del planeta –EU y China– se reflejan en su reciente «literatura económica nacionalista» –de la que, por cierto, está sobresaturado EU que se pasa viendo la paja en las retinas ajenas.
China aún no cuenta con la sofisticación y la sincronización de los multimedia de EU, especializados en la mendacidad instantánea y en la desinformación permanente gracias a su control del cibernético «dominio» (en el doble sentido posmoderno de la palabra) de Internet, mediante el cual ejerce tanto la agenda global como la «guerra sicológica» contra sus pletóricos adversarios, a los que ha agregado su fobia religiosa al Islam como su abominación racial a los mexicanos.
El concepto de La guerra de las divisas nos atrajo desde nuestro libro de hace 14 años, censurado por la fauna zedillista, que resultó exageradamente premonitorio –Guerras geoeconómicas y financieras: el petróleo del golfo Pérsico al Golfo de México (que, junto a otros libros agotados, pronto estará en nuestra página alfredojalife.com)–, porque aplica los conceptos bélicos y geopolíticos al «dominio» de las finanzas globales, que abrazamos con el término de «geofinanzas».
Hechos: La guerra de las divisas, de Song Hobing, devino en el obligado libro de cabecera de la elite gobernante china, cuya teoría fundamental sentencia que los países «occidentales» del G-7 –ya no se diga sus colonias tropicales sojuzgadas como México– están controlados por un grupo de «banqueros privados» que gobiernan sus bancos centrales, lo cual no tiene nada de original y hemos expuesto desde hace mucho como la desregulada globalización monetarista centralbanquista.
Song, vilipendiado por los palafreneros y blogueros del sionismo financiero global como adicto a las «teorías conspirativas», aduce que el principal » banco central» del planeta, la Reserva Federal (Fed), un banco insólitamente propiedad de la misma banca de Wall Street, es quien ejerce el mayúsculo control financiero global.
¿Cuál es la novedad? Song identifica a un grupo de «banqueros israelíes (¡extrasupersic!)» como controladores de los países occidentales, en general, y de EU, en particular, quienes usan «la manipulación de las divisas» al otorgar créditos a los países en vías de desarrollo para luego apabullar sus divisas mediante el concurso de los «derivados financieros», como sucedió con la década perdida de Japón, la crisis financiera asiática de 1997 y la crisis latinoamericana, es decir, el pionero efecto tequila (ejecutado por Goldman Sachs y tolerado por el salinista Pedro Aspe Armella y el cordobista Zedillo), el efecto dragón, el efecto vodka, elefecto samba, el efecto tango sin tanga, etcétera, a los que, por cierto, hemos consagrado 14 años de investigación.
Su impactante revelación versa sobre el papel cupular en la pirámide del poder financiero global por los Rothschild, los legendarios banqueros » esclavistas» (The Financial Times dixit), quienes detentan una impresionante fortuna dinástica de 5 millones de millones de dólares (trillones en anglosajón) «frente a la fortuna de 40 mil millones de Bill Gates», 125 veces menor. ¡Aquí el miserable Carlos Slim y sus triviales 60 mil millones de dólares ni pintan!
Los 5 millones de millones de dólares de los «esclavistas» banqueros Rothschild equivalen prácticamente al PIB nominal de China, el tercer lugar global (detrás de la Unión Europea y EU).
Destacan tres postulados de Song, quien trabajó 14 años en EU en las delicadas áreas de las telecomunicaciones y las finanzas:
1. «Quien controla la emisión de moneda controla al país entero», lo cual coincide con la filosofía sanguinaria de Mayer Amschel Rothschild, fundador de la dinastía bancaria global del siglo XVIII: «Dame el control de la moneda de un país y no me importa quien haga las leyes». ¡Pues sí!;
2. El «sistema (sic) de la Fed» de 12 bancos centrales regionales en EU está dominado en realidad por su principal filial, la Reserva Federal de Nueva York que, a su vez, está controlada por «cinco bancos privados» de Wall Street: «Citigroup, JP Morgan Chase, Morgan Trust, Hanover y Chemical Bank», curiosamente, los principales apostadores de los ominosos «derivados financieros». Aquí podemos discutir levemente y agregar, de acuerdo con nuestras investigaciones, a Goldman Sachs, Bank of America, Wachovia y la rama estadounidense de la banca británica HSBC, entre otros, lo cual no transforma mucho la infraestructura aludida de control «privado», y
3. La «asociación de George Soros con el circuito de los Rothschild» lo convirtió en el «líder del grupo financiero más poderoso y secreto (sic) del mundo». Pues ni tan «secreto»: hace mucho que lo expusimos en Bajo la Lupa, lo cual nos valió el hilarante cuan delirante anatema del sionismo financiero global y sus palafreneros locales y regionales muy bien lubricados.
¿Dónde queda el Inter-Alpha Group of Banks que controlan también y tan bien los esclavistas banqueros Rothschild?
Por extrañas «coincidencias» resulta y resalta que la Fed, el banco central literalmente controlado por la banca «privada» de Wall Street, haya sido gobernada durante 19 años por el israelí-estadunidense Alan Greenspan, malhadado y malvado inventor de los «derivados financieros» y timonel de la desregulada globalización monetarista centralbanquista, quien fue sustituido por Ben Shalom Bernake, también israelí-estadounidense, como los cuatro restantes del total de siete miembros de su consejo de administración: el vicegobernador Donald L. Kohn (quien acaba de renunciar seis años antes de tiempo); Randall S. Kroszner; Frederic S. Mishkin, y el mismo Greenspan: es decir, cinco de los siete miembros del consejo son israelí-estadounidenses. ¡Se les pasó la mano!
Song proclama persuasivamente que la «camarilla (sic) de los banqueros» le ha ganado la batalla a los gobiernos occidentales, por lo que aconseja al gobierno chino mantener la alerta ante una guerra financiera contra el yuan/renminbi por la banca de Wall Street y la City.
Conclusión: resulta muy extraña, para decir lo menos, la sucesión intercomunitaria en la cúpula de la Fed con una probable duración total e ininterrumpida de 33 años (la sumatoria de Greenspan y Bernanke), así como la integración aplastantemente sectaria de su consejo de administración.
Pero también puede reflejar una simple casualidad sin causalidad, si no existiesen otros datos apabullante y simbólicamente significativos que iremos desmenuzando sabrosamente para sustentar nuestra hipótesis operativa, de carácter weberiano y geopolítico financiero, sobre las redes y la omnipotencia del sionismo financiero global que controla también y tan bien a la cúpula del FMI y el Banco Mundial.
Amerikua jedis 
Mayra Abarca said
TOMADO DEL LIBRO LA VENIDERA TRANSICION MUNDIAL
con permiso del autor.
El Banco de la Reserva Federal, en el cual participan las familias más poderosas del mundo, como los Warburg, los Rockefeller y los Rothschild, no es una banca pública y por tanto no está sujeta a los con-troles de la administración ó del parlamento estadounidense. Aunque su nombre sugiere que se trata de una institución oficial, el Reserva Federal Bank es en realidad una empresa privada. Es cosa notoria que este instituto, en el cual participan los Rothschild con el 53% (203.053 acciones), jamás ha estado bajo el control del gobierno ó del parlamento estadounidense. No solo el Reserva Federal, también todos los otros bancos centrales son propiedad privada. En su discurso ante el Senado, el 15 de diciembre de 1987, el senador Jesse Helms dijo:
“El instrumento principal de control sobre la economía y el dinero estadounidense es el Sistema de la Reserva Federal. La Reserva Federal tiene un monopolio sobre la inversión del dólar como divisa mundial y la determinación de la tasa de interés, y dispone de muchos más monopolios.”
Wright Patman, presidente de la Reserva Federal hasta 1975, recordaba:
“En los Estados Unidos tenemos, en efecto, dos gobiernos. Tenemos el gobierno legalmente establecido. Luego tenemos un gobierno independiente, descontrolado y falto de coordinación en el Sistema de la Reserva Federal, que maneja las fuerzas del dinero que están reservadas al Congreso por Constitución.”
Durante una entrevista con Jim Lehrer, Alan Greenspan (ex-jefe de la Reserva Federal) declaró:
“La Reserva Federal es una AGENCIA INDEPENDIENTE, y eso significa básicamente que no hay otra agencia de gobierno que pueda revocar las acciones que tomamos, siempre y cuando esté en su lugar y no haya pruebas de que la administración o el Congreso o cualquier otro, nos pida que hagamos otras cosas de lo que creemos adecuado, luego para lo que las relaciones se han hecho, francamente no es importante.”
En otras palabras, ellos no son responsables ante nadie.
Mayra Abarca said
Milton Friedman es probablemente el economista más influyente del siglo XXI. Fue profesor de varias universidades y presidente de la Asociación Norteamericana de Economía. En 1976 fue galardonado con el premio Nobel de Economía. En una entrevista radial en 1996, dijo:
“La Reserva Federal definitivamente causó la Gran Depresión al retirar un tercio el dinero de la circulación desde 1929 a 1933.”
En una entrevista radial con Radio Australia el 17 de Julio de 1998, (transcrita en la página web de Dinero, Mercado & Economía), Fried-man echa leña al fuego cuando dice que:
“Todos los banqueros centrales continuaban diciendo que ellos estaban siguiendo políticas de dinero fácil y que la economía estaba en declive, a pesar de y no debido a sus acciones. En los Estados Unidos, de 1929 a 1933, la cantidad de dinero se redujo a un tercio. Del mismo modo en Gran Bretaña disminuyó hasta 1931, cuando Gran Bretaña dejó el estándar de oro. En todo momento, de 1929 a 1933, la Reserva Federal tuvo el poder y la habilidad de prevenir la disminución de la cantidad de dinero y de haber incrementado ésta a CUALQUIER TASA DESEADA. Cuando se aprobó la Ley de la Reserva Federal en 1913, su objetivo principal era no crear “pánico bancario”, como se les llamaba, crisis temporales que habían ocurrido en los Estados Unidos en 1907 y durante períodos anteriores. Lo que hizo fue presidir el peor pánico bancario en la historia de los Estados Unidos. No solo la cantidad de dinero se redujo en un tercio sino que cerca de un tercio de los bancos quebraron y en la primavera de 1933, el Sistema de la Reserve Federal, que había sido creado para prevenir pánicos bancarios, cerró sus puertas y dejó de operar. Esa es una lamentable actuación.”
¿El motivo? Muchos bancos se derrumbaron y de sus ruinas se erigieron los bancos corporativos más grandes de los Estados Unidos. En otras palabras, concentración de poder. Como Alan Greenspan lo dijo con tanta elocuencia: “Esto no tiene nada que ver con el gobierno.”
¿Democracia? ¿El poder del pueblo?
El 8 de noviembre de 2002, el Presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, durante un discurso en honor del cumpleaños número 90 de Friedman, respondió lo siguiente:
“Me gustaría decirle a Milton: Respecto a la Gran Depresión; Tienes razón, lo hicimos. Lo sentimos mucho. Pero gracias a usted, no lo volveremos a hacer.”
A pesar de esta declaración, en agosto de 2008 crearon la crisis norteamericana de viviendas que se expandió después al mundo entero. ¡Los bancos emitieron hipotecas sin verificar si los clientes tendrían los recursos necesarios para pagarlas o no! ¿Cree usted eso? Los bancos se rigen de acuerdo a una jerarquía de tipo militar. A los bancos no les importa si las personas pueden pagar sus hipotecas o no. Ellos son dueños de las casas y las casas no se van a ninguna parte. Pueden tirar del enchufe cuando les dé la gana.
La gente piensa que cuando el mercado bancario y acciones colap-san, esto es malo para todo el mundo, pero realmente no es así. Si usted sabe que un colapso de acciones se aproxima (porque es usted quien lo va a causar) entonces vende las acciones al precio más alto, rompe el mercado y luego lo compra otra vez por un par de centavos de dólar. De esta manera aquellos que han causado la caída del mercado pueden ahora hacerse de jugosas ganancias mucho mayores y tener un poder financiero mayor al que tenían antes de la “crisis” y pagarán relativamente muy poco para asegurarlo. Los Rothschilds han usado estas famosas ó infamemente famosas técnicas por eternidades y lo seguirán haciendo. Si usted es dueño del juego, usted siempre ganará ya que es usted quien hace las reglas.
Gracias a la caída en los Estados Unidos, todo el mundo está en crisis económica desde el 2009. En la mayoría de las regiones impor-tantes del mundo, la recesión económica es profunda, lo que origina un desempleo masivo, el colapso de los programas sociales del Estado y el empobrecimiento de millones de personas. Todas las categorías de la fuerza de trabajo se ven afectadas. Los pagos de los salarios ya no se incrementan, el crédito es interrumpido y las inversiones de capital están en un punto muerto. Mientras tanto, en los países occidentales, la “red de seguridad social” heredada del estado en su época de apogeo, la cual está llamada a proteger a los desempleados durante una recesión económica, también está en peligro. La crisis económica y social de ninguna manera ha llegado a su clímax y países enteros, tales como España y Grecia están en riesgo.
La crisis económica va acompañada de un proceso mundial de mili-tarización, una “guerra sin fronteras”, dirigida por los Estados Unidos y sus aliados de la OTAN. En 2010 Bill Clinton dijo lo siguiente:
“La guerra está indisolublemente ligada al empobrecimiento de la gente en casa y en todo el mundo. La militarización y la crisis económica están íntimamente relacionadas. La provisión de bienes y servicios esenciales para satisfacer las necesidades humanas básicas ha sido sustituida por un carácter lucrativo ‘máquina asesina’ en apoyo a ‘La guerra de Estados Unidos contra el terrorismo’. Los pobres se hacen para combatir a los pobres.
Sin embargo la guerra enriquece a la clase alta, que controla la industria, las armas de la milicia, el petróleo y la banca. En una guerra económica, la pobreza es buena para la sociedad y el poder es bueno para la política. Las naciones occidentales, especialmente Estados Unidos, gastan cientos de miles de millones de dólares al año para asesinar a personas inocentes en lejanas naciones empobrecidas, mientras que la gente en su propio país sufre las diferencias de la pobreza, división de clase, género y etnias raciales.”
¿Cuál es la causa verdadera de la crisis económica? La crisis de los mercados financieros en 2008-2009 fue el resultado de un fraude insti-tucionalizado y manipulación financiera. La crisis de crédito se debió a la falta de dinero, creando al mismo tiempo una deuda pública insupe-rable. El “11 de Septiembre” de 2008 (como en 1929), los poderes existentes retiraron de circulación miles de millones de dólares. Esto es lo que realmente causó la crisis financiera internacional, cuya finalidad no es otra cosa más que implantar un único sistema financiero mundial con su respectiva moneda.
El 11 de mayo del 2010, Dominique Strauss-Kahn, director de la “Fundación Monetaria Internacional” dijo en Zúrich: “La crisis y sus todavía permanentes consecuencias, son una oportunidad para asentar reformas. Entre otras una nueva moneda global y un banco central global.”